Me encanta esa sensación de ser vuestro juguete, de
estar entre vuestras manos, esa mezcla de rudeza y delicadeza me está matando…
No os puedo dejar de mirar mientras soy el centro de vuestros juegos, de
vuestro deseo, de vuestro placer. No paro de observar vuestras caras mientras
me poseéis, y veo fijamente esa cara de morbo que lleváis instalada.
Me dejo hacer y llevar, entro en vuestro juego de
cabeza, y sobre todo observo como ella me toca, la delicadeza de sus manos,
como sabe hacerme retorcer de placer y sigue el juego, comienza a tocarme en
ese centro de placer que ya está rebosante de humedad, y no le cuesta hundirse
en mí, sus dedos para mi sorpresa son hábiles, me empieza arrancar gemidos de
placer, una y otra vez, no puedo contenerlos, salen de mi boca como si nada, mi
cuerpo vibra, responde ante sus estímulos y no lo puedo detener, no había tenido
esa sensación antes, el que una mujer me tocase, pero lo estoy disfrutando ante
tu mirada. Los dedos de ella salen y entra en mi interior con terrible
facilidad, pero mis ojos no paran de mirarte, ven tu cara de deseo, de disfrute,
notando como tú también te vuelves loco con esto, viendo como una mujer juega
conmigo, como lo disfruto y como tú y solo tu eres el que ha orquestado todo
esto, mi cuerpo reacciona, y has accionado ese mecanismo que me vuelve loca,
sabes que me encanta jugar y mi clímax está cerca, ella también lo sabe y
comienza a agitar sus dedos en mi interior de una manera infernal para mí, y
sin poder remediarlo un afluente sale de mi interior, mis piernas vibran, mi cuerpo
se levanta de la cama y pronto tus manos llegan a mi clítoris para hacer ese
orgasmo mucho más intenso si cabe la posibilidad… 
Disfruto de vosotros como una
loca y cuando pienso que mi placer se acababa ahí, no… Vuelve otra vez, sus
dedos salen de mi interior pero rápidamente los tuyos ocupan su lugar, y no se
detienen, no me dan un respiro y comienzas a agitarlos con avivez. Mi cuerpo no
tarda en reaccionar ante la posesiva de tus dedos, y sin quitarle el ojo a la
cara de esa mujer, sigo disfrutando, verla de esa manera, con ese vicio que me
mira hace que mi cuerpo siga respondiendo, y tú lo haces responder, convulsiona,
estalla en otro maravilloso orgasmo y noto ese líquido caliente resbalando por
mis muslos, y ella sin dudarlo un segundo se abalanza sobre mi sexo, quiere
probarme, saborearme y yo la dejo gustosa acariciando esas oleadas de placer
que me provocáis…
Pero no puedo más, has despertado a la fiera y
cuando recupero el aliento, me abalanzo sobre esa belleza morena; una chica
despampanante, morena, alta, esbelta… Nunca imagine que una mujer me pudiese
llegar a producir ese morbo que me está produciendo esta chica, pero ahí estoy
yo, abalanzándome sobre su boca, notando el sabor a mi sexo, a mí, uhmmm sabe
deliciosa, su lengua y la mía poco tardan en enredarse, mis manos vuelan por su
cuerpo, es algo desconocido para mí, pero a la vez me resulta tan familiar que
me cuesta poco encontrarme.
Deslizo mi boca por su cuello, paso la lengua
despacio, notando como su bello se eriza, como su respiración se agita, y sigo
mi camino, me pierdo en su garganta y poco a poco bajo hasta su pecho,
entreteniendo en el, antes de llevar a mis labios ese pezón erecto que me pide
a gritos ser chupado… Y se deja hacer, su cuerpo responde ante mis estímulos,
mis manos no paran quietas y siendo que se mueven solas, deslizo una mano entre
sus piernas y noto ese calor, esa humedad palpable, pero mi otra mano sabe que
tu estas ahí, te busca, y se topa con esa maravillosa erección caliente y durísima
de ver el tremendo espectáculo… 
No puedo más, quiero vuestras bocas, probaros a la
vez, disfrutar de vuestros labios, y sin pensarlo uno nuestras bocas, los tres
empezamos a besarnos, mientas mis manos os tocan, y siento vuestros gemidos en
mis labios… Creo que me voy a volver loca, me siento completamente excitada,
noto mis muslos empapados y mi ansia de vosotros no se frena…
Con ganas de mando hago que ella se tumbe frente a mí,
quiero probar a que sabe, pero quiero que tú lo veas y disfrutes también… Sin
pensarlo me abalanzo sobre su sexo, algo inexplorado para mí, pero a la vez
morboso, y yo no puedo dejarte fuera de juego, te ofrezco mi sexo totalmente
expuesto para ti, a cuatro patas sobre la cama, mientas saboreo a esa preciosa
chica, me ofrezco a ti, para que me folles, para que disfrutes de mí, y para
que disfrutes con lo que estás viendo en ese preciso momento. Y no lo dudas, de
una sola estocada te cuelas en mi interior, me arrancas un gemido brutal que
sale de mi boca pero que va a parar al coño de ella, se remueve, al notar cada
pase de mi lengua por su sexo se aviva más, comienza con un vaivén de caderas
sobre mi boca que hace que me vuelva loca, empiezo a escuchar sus gemidos, y de
la misma manera que ella se mueve sobre mi boca tú lo haces tras de mí, me volvéis
loca, me hacéis perder la cabeza y toda lista para mi introduzco dos dedos en
su interior,, haciendo que grite de placer, y tu como no al ver la escena te
vuelves loco, empiezas a bombear dentro y fuera de mi con un frenesí apoteósico…
Tu estas cerca del clímax al vernos a las dos
disfrutar, yo estoy completamente loca por disfrutar de vuestras corridas y
ella está disfrutando como loca de ver cómo me follas y sentir como me muevo en
su interior para sacar ese orgasmo de placer…. Y no tardamos mucho, explotamos
cada uno con el otro….Noto tu corrida en el fondo de mi ser, como tu
esencia caliente me llena por completo, por mis muslos empieza a descender los
restos de mi orgasmo frenético, y mis dedos empiezan un ritmo más lento y
pausado después de ver los espasmos de esa maravillosa chica agitándose sobre
mis dedos… Mi boca recoge los últimos restos de ese orgasmo y guarda el sabor
en ella…
Acción, reacción, esa combinación perfecta, ese
momento de placer compartido, eso de empezar a descubrir una parte totalmente
morbosa para mi es indescriptible…
Y vosotros ¿Os atrevéis a accionar ese mecanismo del
juego para ver como sois capaces de reaccionar?
